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1. Trayectorias laborales de mujeres en ocupaciones tradicionalmente masculinas:
1.1. Mujeres en la construcción. El sector de la construcción es el que porcentualmente está más segregado del conjunto del tejido productivo, tanto en España como en la mayoría de los países de nuestro entorno. En este sector la proporción de trabajadoras, aunque ha observado un ligero aumento en las últimas décadas, nunca ha sido superior al 9% (EPA, INE).
Dentro de las diferentes especialidades del sector de la construcción, el oficio de pintor/a fue seleccionado por algunas instituciones responsables del diseño e implementación de políticas de empleo y acción positiva como un campo proclive para superar la fuerte segregación del sector; de forma que se cuenta con un grupo de mujeres que recibió formación teórica y práctica de cierta extensión (hay cursos de hasta 20 meses de duración) y suficiente experiencia laboral. En este contexto, un primer objetivo de la presente investigación sectorial será evaluar el efecto que este tipo de políticas de formación ha tenido sobre la trayectoria laboral de las beneficiarias, y compararlas con las trayectorias de las mujeres que, trabajando en la construcción, no han pasado por estos procesos formativos. Además, se profundiza en los tipo de trayectorias laborales (economía sumergida, falsas autónomas, planes de empleo,...) y de los factores asociados a los éxitos y los fracasos de estas mujeres, especialmente los problemas de conciliación, las dificultades de acceso y los estereotipos sexistas, la fuerza física y la presentación social del cuerpo.
1.2. Mujeres pilotos de aeroplano. La incorporación de mujeres al trabajo asalariado como pilotos de aviación es en España, como en otros países, relativamente reciente. Aunque en la historia de la aviación destacaron aviadoras pioneras, actualmente hay pocas mujeres que trabajen como pilotos de aerolíneas. No disponemos aún de cifras para España. Pero en EEUU, país en el que el empleo como piloto se abrió a las mujeres en los años 1970´s, las cifras siguen siendo muy bajas. Para el año 2011 los analistas calculan que las mujeres son en ese país un 6% de los pilotos activos. Las razones que señalan para esta baja incorporación femenina se centran en las dificultades para el acceso a la titulación de piloto, pues entre éstas habrían algunas que afectarían sólo a las mujeres: en este sentido, señalan los estilos comunicativos de los instructores de vuelo. Además, señalan otras causas, como la imagen masculina del oficio, que atraería a menos candidatas y el menor apoyo material de las familias a las mujeres lo que redundaría en una menor disposición a costearles una carrera muy onerosa.
Un primer objetivo de la presente investigación sectorial será identificar trayectorias de formación y de incorporación a esta profesión de las mujeres piloto en España. Otro objetivo es identificar los factores asociados a los éxitos y los fracasos de estas mujeres una vez incorporadas al oficio, especialmente los problemas de conciliación, las dificultades de acceso y los estereotipos sexistas, la aptitud física y la presentación social del cuerpo.
1.3. Mecánicas en talleres de reparación de
vehículos de motor. La ocupación de mecánico trabajando en
talleres de coches está altamente masculinizada. En conjunto, las
ocupaciones que aglutinas a los “Mecánicas y ajustadores de
maquinaria” presentaban en el Censo de 2001 una proporción femenina
del 4,62% (acceder
a los datos). (Categoría 761 en la CNO94 formada por los que
trabajan con maquinaria, vehículos de motor y motores de avión).
Interesa dibujar las diferentes trayectorias laborales de las
mujeres que han tenido algún tipo de experiencia en esta ocupación,
los motivos por los que se inician, por qué continúan, los problemas
que tienen que enfrentar. Además, se hace un énfasis especial en el
papel de las microempresas a la hora de intentar superar las
situaciones de segregación.
1.4. Mujeres policías. Hay
dos estereotipos negativos sobre las mujeres que funcionan para
legitimar la escasa presencia femenina en el trabajo de policía: las
mujeres tienen menor disposición tanto a afrontar peligro físico
como a ejercer la autoridad. Sin embargo, en los últimos años se
observa un aumento generalizado de la presencia femenina en todos
los países de nuestro entorno. Y además los cuerpos de seguridad del
Estado y en general el sector de la seguridad son de los pocos que
han mantenido crecimiento de empleo en la crisis económica que se
inicia en España en 2008. Nos encontramos con una ocupación en pleno
cambio en cuanto a la presencia femenina (lo que nos indica que un
análisis generacional va a resultar muy enriquecedor), y donde cobra
especial importancia la especialización profesional y las
posibilidades de carrera que pueda suponer. Además, nos interesa
profundizar en la masculinización del cuerpo y la pose y los
problemas de stress laboral y acoso.
1.5. Reparadoras de
Hardware.
En la
Comunidad murciana, para datos del curso 2012-2013, sólo un 12,5% de
los alumnos matriculados en el Ciclo Formativo de Grado Medio
en Sistemas microinformáticos y redes son mujeres, un 18% en el
Ciclo Formativo de Grado Superior en Administración de Sistemas
Informáticos en Red. Parece que esta es una tendencia general en el
conjunto de nuestro país. En este contexto, interesa conocer las
razones que han llevado a estas mujeres a elegir una formación en
las que son minoritarias, los tipos de trayectorias laborales que se
pueden observan, y los factores asociados a sus éxitos y sus
fracasos.
1.6. Mujeres ferroviarias.
Se entienden los mecanismos de exclusión hacia las mujeres en el
sector ferroviario como una consecuencia directa de las políticas de
organización de empresa. En concreto, en la historia ferroviara
española es de destacar La Escuela de Formación de Aprendices,
que supuso un instrumento de acceso igualitario a RENFE, pero se
cierra a los tres años de su apertura a las mujeres. El resultado de
permitir el acceso a la formación profesional específica
supuso el ingreso de varias decenas de mujeres en ocupaciones
‘genuinamente masculinas’. A partir del cierre de la Escuela, la
tasa de entrada de mujeres en estas ocupaciones ha ido disminuyendo,
lo que nos plantea que la presencia de las mujeres en el empleo
ferroviario sigue estando muy orientada desde la dirección.
1.7. Estibadoras portuarias. La estiba se encuentra en un
sector que todavía se mantiene íntegramente masculinizado en algún
punto geográfico del Estado Español, esto nos indica el nivel de
resistencia al cambio imperante en la profesión por parte de los
hombres que lo componen y los altos niveles de poder. Se trata de
una profesión no regulada por el Estatuto de los Trabajadores ( RDL
1/95) sino por una Relación Laboral de carácter Especial (R.D.
2541/1994-R.D.L.G. 1/1995-R.D. 1424/2002-R.D.L. 3/2005-R.D.L.
2/2011), que ofrece un alto nivel de protección y calidad en el
empleo. Además, es una profesión con barreras de entrada en su
acceso a pesar de no requerir elevados niveles de formación ni
capacitación, lo que nos indica el alto nivel de poder de
negociación todavía existente en el sector.
1.8. Reporteras gráficas. En algunos países, como Estados
Unidos, la creciente integración de mujeres fotoperiodistas es una
tendencia consolidada. No así en España, donde la participación
femenina es inferior al 10 por ciento. Si la investigación sobre
género y medios de comunicación está todavía poco desarrollada, los
estudios sobre sub-representación en el ámbito de la fotografía
informativa/documental son prácticamente inexistentes. No obstante,
si se adoptan como hipótesis los hallazgos alcanzados en el ámbito
de la prensa gráfica, los principales obstáculos estarían asociados
a una cultura profesional con sesgo androcéntrico, un aspecto a destacar en el caso de Joana Biarnés. Otra importante
cuestión, según el testimonio de foto-reporteras como Anna Turbau
(AmecoPress, 2014), es la incompatibilidad socio-cultural que impone
la decisión de ejercer la maternidad. Cuestión que ilustra el guion
del reciente film auto-biográfico “Mil veces buenas noches” de Erik
Poppe.
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